5 remedios caseros para curar la artritis
Por Heliana Guirado
La artritis está definida como la "inflamación de las articulaciones de los huesos" y sus causas pueden variar desde el desgaste hasta algunas infecciones.
Por eso, a continuación te damos una lista con cinco opciones de remedios caseros y naturales que te ayudarán a eliminar el dolor y mejorar tu estado de salud.
1. Jengibre
Esta raíz medicinal es muy útil para la artritis ya que tiene muchas propiedades antiinflamatorias. Para aprovechar al máximo sus beneficios puedes preparar un té frío o caliente con 200 gramos de jengibre, agua y miel. Tómalo las veces que quieras y verás los resultados si algún día estás muy dolorido.
2. Cúrcuma
Este ingrediente usado mundialmente para cocinar también es antiinflamatorio y antioxidante, por lo que si sientes dolor en alguna parte del cuerpo, puedes probarlo en forma de bebida añadiendo en 750 ml de agua tres cucharadas de cúrcuma y miel (a gusto).
3. Semillas de lino
Estas pequeñas semillas son muy poderosas y seguramente no te imaginabas que podrían ser útiles para aliviar el dolor articular. Pero lo cierto es que sí y el motivo principal es la base de Omega-3 que contiene. Para probarlas puedes añadir dos cucharadas a tus ensaladas o cualquier otro tipo de comida, o bien comerlas directamente ¡Son riquísimas!.
4. Terapia de frío/calor
Si ves alguna hinchazón en tus articulaciones, lo mejor que puedes hacer es colocar una compresa fría sobre la zona afectada. Y si por el contrario lo que necesitas es relajar articulaciones que están tensas, opta por el calor. En las farmacias existen compresas que puedes comprar, o bien puedes prepararlas de forma casera con lo que tienes en tu hogar.
5. Romero
Seguramente no sabías que esta hierba es muy efectiva para la artritis y eso se debe a que posee ácido ursólico, ideal para combatir infecciones como las que se producen en las articulaciones y cartílagos. Si quieres disfrutar de una rica bebida y a la vez efectiva, coloca 200 gramos de romero en 400 ml de agua caliente. Espera que se enfríe y toma la infusión al menos dos veces por día o hasta terminarla.
Si pones a prueba alguna de estas opciones seguramente lograrás eliminar el dolor y sentirte mejor. Sin embargo recuerda ser constante y consultar con tu médico de confianza, ante cualquier duda que tengas.